Comercio chino en la cúspide bogotana
El comercio Chino se tomó locales, bodegas y varias zonas comerciales en Bogotá, principalmente en San Victorino y San Andresito. La venta de productos chinos a menor precio está afectando el comercio textil y la oferta de artículos de cualquier tipo en los negocios bogotanos. Esto se ha convertido en una preocupación para vendedores, proveedores y mayoristas de la ciudad, ya que muchos productos son vendidos por los asiáticos en gran escala, lo que disminuye las ventas.
¿Qué dicen los comerciantes capitalinos?
A pesar de las inconformidades que han manifestado los confeccionistas, vendedores y productores bogotanos, este tema sigue sin concluir, pues los chinos tiene entrada libre a Colombia, en cuanto a la venta de sus productos; además la mayoría no declaran ante el Gobierno (Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, Ministerio de Hacienda y DIAN) la totalidad de los ingresos que reciben producto de sus ventas, lo que disminuye el valor a pagar en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y en el Impuesto de Sociedades.
¿Qué dicen los chinos?
Ventana Abierta se contactó con dos vendedores orientales (por seguridad no autorizan revelar sus nombres ni el de sus locales), ellos han elegido el barrio San Victorino como lugar de trabajo. Manifiestan que el comercio en la capital de la República es viable, pues están compitiendo con un precio mucho más bajo, los cuales no dejan muchas ganancias por unidad, pero sí por cantidad. Consecuencia de ello es que el producto bogotano se va desplazando por el flujo de mercancía china que llega a la ciudad, un ejemplo de ello es la venta de una camisa, la cual es vendida por los colombianos aproximadamente en $24 mil pesos; mientras que los asiáticos venden una prenda igual a $8 mil pesos. Lo mismo puede suceder con los artículos de aseo, de carros y demás.
¿En qué invierten sus ganancias?
Muchos de los recursos que recaudan los chinos son invertidos en productos que luego exportan a otros continentes y que son cambiados por monedas del país correspondiente, debido a que China es un país que tiene que cobrar y producir grandes cantidades de materia prima.
Se calcula que en promedio los chinos pagan en arriendo $15 millones por un local de $5 millones en San Victorino, además de esto tienen que cancelar el alquiler de los negocios por un año y las llamadas “primas” por un valor que supera los $500 millones de pesos. ¿Qué logran con esto?, sacar del comercio a 20 o 30 vendedores bogotanos, así lo dieron a conocer los dos asiáticos entrevistados por Ventana Abierta.
Muchos de los ciudadanos también se preguntarán por qué los chinos han puesto su mirada en Colombia, a lo que ellos respondieron que en España existe el “China Town”, que es un sector donde residen muchos chinos que han decidido instalarse en este país de Europa para poner almacenes, los cuales se encuentran actualmente explotados. Por esta razón, el padre de uno de los entrevistados decidió establecer su almacén en Colombia. Además, manifestaron que este modelo de comercio está creado para establecerse en otros países porque son negocios creados para las personas extranjeras.